El presidente de México, Enrique Peña Nieto (EPN), promulgó este viernes la Ley General de Mejora Regulatoria, con el fin de agilizar los trámites gubernamentales y, como consecuencia, abaratar costos y evitar duplicidades en los procesos.
Peña Nieto subrayó que, con esta ley, se fortalece el marco jurídico que protege a la ciudadanía de acciones improvisadas y caprichosas de la autoridad.
“Esta ley es un antídoto contra la poca transparencia o la opacidad, contra la corrupción, contra la arbitrariedad, contra la ineficacia, contra la incongruencia y la falta de ética en el servicio público”, dijo EPN.
Además, agregó, “empodera al ciudadano brindándole certeza jurídica en los tiempos, procedimientos y costos que debe realizar ante los tres órdenes de gobierno”.
Durante la ceremonia de promulgación de esta ley, el presidente detalló que la Ley General de Mejora Regulatoria cuenta con cuatro ejes centrales:
En primer lugar, señaló que, se “eleva a rango de política de Estado la mejora regulatoria”, lo que obliga a las autoridades de los tres órdenes de gobierno a perfeccionar regulaciones, simplificar trámites y mejorar servicios.
Como segundo eje se crea un sistema de mejora regulatoria, que vinculará a las autoridades públicas para compartir una metodología común en la materia.
Crea, además, 32 entidades de mejora regulatoria y hace de la Cofemer una transformación “para convertirse en una comisión nacional” en el sistema de mejora regulatoria.
El tercer eje tiene que ver la creación de un portal de internet donde estarán los requerimientos federales, estatales y municipales; así como un expediente único “para que los usuarios no tengan “que volver a entregar documentos que les fueron requeridos previamente”. Algo que es posible gracias a la tecnología digital.
El cuarto eje tiene que ver con involucrar a la sociedad para que vigile que lo plasmado en el ordenamiento se cumpla. Para ello se creó el Observatorio Nacional de Mejora Regulatoria.
Peña Nieto recordó que, desde el acuerdo 2 por 1 en materia regulatoria, a través del cual se eliminan dos trámites por cada regulación que se proponga, entre 2012 y 2018 el costo de los trámites realizados en el orden federal se redujo de 4.25 a 2.58% con respecto del PIB. Mientras en los países de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) el costo es del 2.5%.
Peña Nieto sostuvo que “hoy México da un paso decisivo para abatir su rezago regulatorio, transitando de un enfoque federal a una auténtica visión nacional, con la activa participación de la sociedad”.
Aunque reconoció que “hay mucho por hacer”, señaló que “hoy se sientan las bases para ir ordenando todo lo que tiene que ver con regulación que hay en todo el país, en todos los poderes y en los distintos órdenes”.